Es un deber de los diseñadores orientarnos hacia un pensamiento más sustentable, reducir la producción al mínimo, generando mayor bienestar para nuestros semejantes; así lo dio a conocer Ariel Rojo, multi reconocido diseñador industrial mexicano en entrevista para Moblaje.

Al concluir su conferencia colmada de jóvenes estudiantes, en el marco de Expo Mueble Internacional, el diseñador consideró que los diseñadores tendrían que hacer menos y pensar más, presentar más soluciones, generar ideas que requieran menor uso de madera, menos agua. “Creo que existe un gran reto para las generaciones que vienen, el generar más valor y diseñar para generar verdaderas soluciones que faciliten la vida, y dar mayor valor a ésta. Esa tendría que ser la visión del diseñador”.

Ariel Rojo se ha concentrado en el mobiliario urbano, de aluminio, acero o piedra, que tienen una gran durabilidad y tiempo de uso, con un impacto social muy alto. Indicó también que la mentalidad de las personas, desde el punto de vista del consumidor, ha cambiado. “Por ello debemos trabajar en darles propuestas novedosas, de una forma sustentable, dar solución a sus problemas y tener un compromiso real con la naturaleza, dar opciones” expresó.

El diseñador industrial, quien conjuntamente a su carrera combina dos de sus pasiones (el arte y la arquitectura), explicó que le gusta trabajar el mobiliario urbano porque puede hacer uso de materiales de larga vida como las piedras, o de materiales de un nivel muy alto de reciclaje como el aluminio o el acero, que nadie las desperdicia, vuelven a conectarse con un reproceso para otro uso, y la energía usada ahí se diluye a lo largo en muchos años. Una pieza puede durar 40 años.

Finalmente, opinó que en el ámbito universitario tiene que haber cambios, todo tiene que cambiar, el arte, el diseño, la economía, todo tiene un cambio, tienen que cambiar, tienen que orientarse mayormente a proyectar cosas nuevas y diferentes, porque el trabajar sobre lo ya hecho y adaptar nos lleva a ser víctimas de nuestra propia inercia, pero cuando proyectas y trabajas en un concepto claro de futuro deseado, es otra cosa.