Una compilación de ideas, de historias y momentos que nacen de la mente creativa e inquieta del diseñador industrial Mauricio Lara, se plasman en su reciente libro, Mauricio Lara: una Historia en Tinta Negra. Negro su color y su tinta, Mauricio disfruta de la vida, busca cosas con fundamento y objetos con trasfondo, y lo plasma así, en trazos, en frases e ilustraciones que se pueden disfrutar como una charla con él; con calma, sin prisas y reflexionando sobre una diversidad de ideas. Moblaje se dio cita en su refugio, que llama casa, para conocer lo que es, desde su propia perspectiva, esta nueva obra. Historias en Tinta Negra, nace de la inquietud de reunir en un libro, todo un material previo que había venido trabajando desde el 2013 en Escribir Delgadito, que a su vez reunía de forma muy personal diversos proyectos que en su momento se tradujeron a objetos tridimensionales.
Esto se logra, explica Lara, gracias al apoyo de Jimena Acosta, curadora del proyecto y amiga personal, que realizó un delicioso trabajo para contar la historia de varias historias en tinta. Reflejando siempre y en cada página, la sensibilidad del diseñador.
Mauricio Lara: Una historia en Tinta Negra, refiere el autor “muestra una colección de 16 proyectos que surgen de la compilación, Escribir Delgadito, y como se fue materializando esta parte de la ilustración, de la gráfica y los textos, y cómo fue adquiriendo otros materiales y formas, en diferentes proyectos como un plafón para un restaurante, un muro, ropa, una escultura en vidrio, un vaso, y hasta un mural de gran formato”.
La obra igualmente, define una parte en la que se ha desenvuelto el diseñador de manera individual: proyectos que están mas orientados hacia el arte, pero siempre como diseñador industrial que se mueve cómodamente por otras áreas como el arte precisamente, el diseño gráfico; pero, sobre todo, destaca Lara, “es un diálogo conmigo mismo en el devenir de diferentes proyectos”.
Este libro es de alguna forma, también, un homenaje a otros profesionales y colaboradores de Mauricio Lara, quien declara que “siempre he sido de la idea que el diseño es una actividad de colaboración al cien por ciento, claro hay un trabajo de investigación, de la toma de decisiones que vas realizando en el avance de los proyectos, pero siempre la actividad del diseñador requiere de la colaboración con otras personas para llevar a ejecución un diseño, bien sea de mobiliario, de joyería, arquitectura u otro tipo”. “La labor del diseñador”, describe,” tiene esa parte que requiere del trabajo conjunto entre talentos, oficios y especialidades de otras disciplinas para lograr un objetivo en común, tienes que trabajar con el artesano, con los pintores, con el fabricante; y por el otro lado el diseñador debe también tener la habilidad de saber escuchar a otros expertos”.
Para conocer más acerca de este libro, visita la edición digital de Moblaje mayo- junio aquí mismo.
