Desde su creación en 2006, Esperanza se ha convertido en un verdadero puente entre la riqueza cultural de México y Guatemala, logrando una fusión perfecta entre tradición y modernidad en el mundo del interiorismo y el diseño artesanal.
Desde su creación en 2006, Esperanza se ha convertido en un verdadero puente entre la riqueza cultural de México y Guatemala, logrando una fusión perfecta entre tradición y modernidad en el mundo del interiorismo y el diseño artesanal. Fundada por Ana Karen Bathen, esta línea de interiorismo ha sabido capturar la esencia de las artesanías de ambos países, revalorizando técnicas ancestrales y dándoles un enfoque contemporáneo.
Con una propuesta innovadora y única, Esperanza ha logrado abrirse paso en el mercado global con presencia en ciudades como Ciudad de México, París, Biarritz y Madrid, lugares donde ha compartido su visión de la estética latinoamericana y su respeto por el trabajo artesanal.
Ana Karen Bathen fundó Esperanza con la intención de ofrecer algo más que productos; su meta era crear experiencias y conexiones a través de piezas que cuentan historias y reflejan tradiciones centenarias. Su concepto de diseño es profundamente respetuoso con las culturas de México y Guatemala, utilizando materiales y técnicas artesanales que preservan las prácticas y conocimientos de las comunidades locales.
Cada pieza es un homenaje al talento y dedicación de artesanos que, mediante el bordado, el tejido y la cerámica, logran capturar la esencia de sus raíces culturales y transformarla en objetos únicos para el hogar.
La oferta de Esperanza se divide en tres líneas que representan su espíritu diverso y su compromiso con la calidad:
Piezas antiguas:
Dedicada a recuperar y restaurar piezas antiguas de ambos países, brindándoles una segunda vida. Cada objeto tiene su propia historia, que se respeta y se conserva a través de una restauración cuidadosa. Esta línea es una apuesta por la sostenibilidad y la revalorización de objetos que, aunque antiguos, conservan una belleza y un valor atemporales.
Colecciones propias:
En esta línea presenta diseños exclusivos creados en colaboración con artesanos locales, utilizando técnicas tradicionales de tejido, cerámica y carpintería. Las colecciones reflejan un estilo moderno y refinado, pero al mismo tiempo destacan la riqueza de los materiales y los métodos de producción ancestrales. El resultado es una serie de piezas que conjugan la simplicidad contemporánea con la profundidad cultural de México y Guatemala.
Curadurías de obras actuales:
Se ofrece una selección de obras de artistas y diseñadores contemporáneos que comparten su visión de un diseño sustentable y con identidad. Esta línea es una ventana al trabajo de creadores que valoran la autenticidad y la conexión con el pasado en sus obras.
La boutique de Esperanza en Ciudad de México es más que una tienda; es un espacio donde los visitantes pueden explorar la cultura y el arte de ambos países. Además, la marca ha logrado una destacada presencia en el extranjero, especialmente en ciudades como París, Biarritz y Madrid, donde ha sido recibida con entusiasmo por el público europeo que valora la autenticidad y el diseño con historia.
Esperanza no sólo busca embellecer los espacios, sino también promover una nueva forma de consumir diseño, basada en el respeto por la tradición y el apoyo a los artesanos locales.
La marca es un testimonio de que el diseño artesanal puede ser elegante, moderno y relevante en cualquier parte del mundo. En un mercado saturado de productos sin identidad, Esperanza destaca por su compromiso con la autenticidad y la sostenibilidad, ofreciendo a sus clientes piezas únicas con un profundo significado cultural.
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