A diferencia de los jardines formales y estructurados, que suelen presentar líneas rígidas y patrones simétricos, los paisajes naturalistas emulan la espontaneidad y las formas orgánicas de la naturaleza. Esta filosofía de diseño promueve una coexistencia armoniosa entre los elementos creados por las personas y el entorno, fomentando un sentimiento de conexión con el aire libre y promoviendo la biodiversidad.
Este enfoque hace hincapié en el uso de plantas y vegetación autóctonas que prosperan en el clima y las condiciones del suelo locales. El resultado son plantas bien adaptadas al entorno que requieren menos mantenimiento y agua además de que proporcionan un hábitat crucial para la fauna autóctona.
Suelen incorporar caminos serpenteantes, formas irregulares y elevaciones variables para imitar la aleatoriedad de la naturaleza. Estos elementos crean una experiencia más envolvente y atractiva para los visitantes, que descubren rincones ocultos y vistas inesperadas. Los paisajes naturalistas irradian tranquilidad y belleza y ofrecen una vía de escape pacífica del ajetreo y el bullicio de la vida moderna.
La mezcla de estructuras artificiales con elementos naturales crea un entorno armonioso y sin fisuras que atrae a los sentidos. Tal es el caso de Polen Paisaje, un estudio fundado hace más de diez años por Ana Julia Carvajal y Alejandra de la Cerda. Ambas describen su proceso creativo como vivo, en movimiento e íntimamente relacionado con el entorno.
Cada uno de sus proyectos cuenta con la misión de permitirle a la naturaleza expresar su propia voz al tiempo que le recuerda a cada persona la importancia del espacio que la rodea.
El agua es un elemento central de diversos estilos de paisajismo naturalista. Estanques, arroyos y cascadas pueden crear una atmósfera relajante y servir de hábitat para la vida acuática. También atraen a diversas especies de aves e insectos, lo que aumenta la biodiversidad general.
A medida que nos enfrentamos a retos medioambientales, la incorporación del paisajismo naturalista a nuestro entorno puede servirnos de recordatorio de la importancia de preservar y cuidar el mundo natural para las generaciones futuras. La importancia medioambiental del paisajismo naturalista puede verificarse en los siguientes aspectos:
Diversidad ecológica
El uso de plantas autóctonas y elementos acuáticos fomenta la biodiversidad al atraer una amplia variedad de flora y fauna. Es más probable que aves, mariposas y otros polinizadores visiten y habiten estos paisajes, creando un ecosistema equilibrado y próspero.
Bajo mantenimiento
Una vez establecidos, los paisajes naturalistas requieren menos mantenimiento que los jardines tradicionales. Las plantas autóctonas se adaptan al entorno local, lo que reduce la necesidad de riego, poda y fertilización.
TIP EXPO MUEBLE INTERNACIONAL VERANO 2023
Al adoptar los principios de la flora local, los patrones naturales, la sostenibilidad y las características del agua, estos paisajes ofrecen una serie de beneficios tanto para los seres humanos como para el medio ambiente.
¿Te interesa aprender más sobre este tipo de paisajismo? Acude a Expo Mueble Internacional Verano 2023 del 16-19 de agosto. Nuestro programa incluye una conferencia impartida por Fernanda Rionda de KOL. ¡Regístrate aquí!
Actualizamos nuestro aviso de privacidad, conócelo aquí