En la encantadora ciudad de Izamal, en el corazón de Yucatán, un proyecto innovador emerge como un guardián del patrimonio de la península: Kanché Izamal. Este espacio único fusiona la tradición ancestral de los Ka‘anches mayas con un enfoque contemporáneo en diseño y gastronomía, creando así una experiencia culinaria y cultural verdaderamente excepcional.
Los Ka‘anches mayas, o huertos suspendidos, son testigos vivientes del conocimiento ancestral de la tierra. Estos huertos encierran secretos milenarios sobre el cultivo y uso de ingredientes locales, que han sido transmitidos de generación en generación. Inspirado por esta rica herencia, el proyecto Kanché Izamal busca honrar y preservar esta sabiduría ancestral, mientras se adapta a los gustos y necesidades del mundo moderno.
Con un equipo multidisciplinario de talentosos colaboradores, Kanché Kinich ha creado un espacio único que combina historia, cultura y gastronomía. El diseño de la terraza-huerto-restaurante, a cargo del estudio Vagantes, rinde homenaje a la arquitectura yucateca tradicional, utilizando materiales locales y técnicas artesanales para crear un ambiente auténtico y acogedor.
Fundado en 2019 por Gina Góngora y Fernando Gómez, el enfoque de este estudio se centra en la transformación de espacios en desuso con una preocupación por comprender cada sitio y una sensibilidad para conservar su esencia. A través de un trabajo de experimentación, el estudio enfatiza la etapa de análisis e investigación en cada proyecto así como un enfoque puntual y discreto en la intervención de espacios.
La construcción de este espacio visionario estuvo a cargo de Eduardo Ancona quien con maestría y atención al detalle logró materializar la visión del equipo de diseño. Cada aspecto de Kanché Izamal, desde su estructura hasta su identidad visual, ha sido concebido para reflejar la esencia y el espíritu del lugar. Ubicado al pie de la majestuosa pirámide de Kinich Kak, el espacio ofrece a sus visitantes una vista privilegiada y una conexión única con la historia y la naturaleza de la región que también se extiende al paladar, con una propuesta gastronómica que celebra los sabores yucatecos en su máxima expresión a cargo de Kinich restaurante.
